El término catalufo proviene de la combinación entre catalanismo y ufología. Es decir, los catalufos no tienen base ni fundamento alguno. Todo en ellos es inventado, tergiversado y soñado.
Paula Badosa es una tenista nacida en Estados Unidos cuya vida se desarrolla a lo largo y lo ancho del mundo. Se desenvuelve en español y en inglés, dos lenguas con las que tiene suficiente en cualquier lugar en el que se disputen torneos de tenis.
¿Para qué necesita el catalán, una lengua que hablan cuatro gatos mal contados? Y cada vez menos, porque al imp9nerlo lo que consiguen los dictatoriales nacionalistas lo que consiguen es generar rechazo. Intentan imponer esa cosa hasta en Valencia, tan grande es su descaro. Que haya algún lingüista sudamericano que de vez en cuando cite al catalán poniéndolo a la misma altura que la lengua española sólo demuestra que ese tipo cobra.
Los catalanistas han gastado mucho dinero, y lo siguen haciendo, que a lo largo del tiempo les vienen dando los sucesivos gobiernos españoles para difundir por el mundo el invento de Pompeyo Fabra. Es dinero tirado a la basura.
No es probable que en su peregrinar por el mundo la tenista se haya tropezado con alguien que le hable en catalán, salvo en el caso de algún periodista subvencionado por el gobierno regional catalán que se haya desplazado hasta el lugar en que esté para hacerse notar.
Si la buena mujer se pasa la vida entrenándose y jugando partidos de tenis, lo normal es que no tenga tiempo para estar al corriente de las neuras de esta gente que no tiene todos los tornillos en su lugar.
Supongo que los catalanes que consiguen mantener sus cabezas en orden en medio de esa orgía de estupidez se habrán avergonzado de la de la reacción de los catalanistas y también de que la interesada haya tenido que disculparse.
Esos mismos descerebrados aplauden que el sujeto que tienen de presidente tenga un comportamiento porcino con el Rey.
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