Algunos listillos lo han catalogado como genio, cuando la realidad es que, por su mala cabeza, está acorralado y lo sabe. Mañana le toca a Begoña pasar el mal trago que se evitó hace un mes. La situación ahora es peor para ella, puesto que Aldama ha dado más datos. Lo curioso del caso es que Begoña da su versión en todas partes menos ante el juez, cuando éste tiene la potestad de mandarla a prisión preventiva o quitarle el pasaporte.
La estrategia de Sánchez consiste en desacreditar a los jueces, porque según él son todos partidarios de Franco. Sobre este asunto cabe decir dos cosas. La primera es que los peores jueces son los partidarios de Sánchez. Y la segunda es que la mayoría de los opositores, también los de justicia, de los últimos años de vida de Franco eran contrarios a éste y la mayoría intervino en las algaradas estudiantiles de finales de los 60. Tras su muerte, Fernando Vizcaíno Casas sacó un libro titulado ‘De camisa vieja a chaqueta nueva’, pues fueron multitud los que abrazaron la nueva fe de la noche a la mañana. Muchos de los que se convirtieron al felipismo formaron parte de su gobierno. De modo que si actualmente hay algún juez franquista debe de ser gracias a Sánchez. Además de esas dos cuestiones, está el detalle de que al PSOE jamás le ha gustado que los jueces sean independientes, y siempre se ha procurado una excusa u otra para someterlos a control.
No es solo Begoña quien está en apuros, sino que son muchos los socialistas bajo el ojo de la justicia. También lo está el hermano de Sánchez, y él mismo acabará siendo imputado también y seguramente los jueces llevarán cuidado para que eso no ocurra mientras sea el presidente, sino que esperarán a que alguno de los muchos escándalos lo hagan caer.
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