En relación con la actitud que adopte Sánchez, el psicópata favorito de los españoles que le han votado y lo sostienen, esos bravucones de salón que son los podemitas, que sólo atacan en grupo y si consideran que tienen la impunidad garantizada, le han amenazado para que no cruce las ‘líneas rojas’. Esto de las líneas rojas está de modo y lo repiten todos los tontos del mundo uno tras otro.
Pero Sánchez, en su cortedad, hay cosas que comprende o se da cuenta y una de ellas es que mientras mantenga a los podemitas en el gobierno no le van a plantear dificultades. Y cada vez tienen menos posibilidades de planteárselas, porque en el momento en que hagan caer al gobierno, que es el arma que manejan, desaparecerán para siempre. Por tanto, sus bravatas sirven para hacer el ridículo y nada más. Es evidente que si lanzan sus amenazas es porque consideran a Sánchez y sus votantes, los de Podemos, por tontos.
Lo mismo ocurre con los demás degenerados que sostienen a este gobierno Frankenstein. La única opción que les queda es exprimir el limón todo lo que puedan, porque si cae este gobierno cabe la posibilidad de que lo que venga luego les dé miedo. De modo que al señor Felón le basta con no hacer caso, si por hacerles no gana nada. Por mucho que Tezanos intente animar a los socios de su amo para que sigan apostando por él y ayudarlo a seguir en la Moncloa, nadie se cree nada, todos están tratando de jugar sus cartas en plan ful de Estambul.
Por parte de personas entendidas en la materia fui informado de que a los psicópatas no les importa serlo, lo que no quieren es que se entere nadie de que lo son. También que no tienen ningún problema, pero los que tratan con ellos los tienen en abundancia.
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