En su día Alemania apostó por cerrar las nucleares y Francia por aumentar las que tenía. Alemania lleva a la UE a la ruina. Felipe González, no se sabe qué les debe a los alemanes, optó por seguir su senda, que nos está llevando a la ruina a los españoles. Gente que muere de frío o de calor por no poder poner la calefacción o el ventilador, ya no el aire acondicionado.
Felipe González sabía que con esta decisión perjudicaba a los españoles, por lo cual no se atrevió a cargar la responsabilidad sobre sus hombros, sino que la trasladó sobre los de los españoles. Para ello organizó un referéndum, o sea un derroche, ante el que no permaneció neutral, sino que gastó otra ingente cantidad de dinero, para llenar España de eslóganes en contra de las nucleares. También organizó otro para seguir en la OTAN, porque antes había metido la pata al mostrarse contrario. Sus equivocaciones las pagábamos los ciudadanos. Eso de que el dinero público no es de nadie ya venía de antes.
No sólo se gastó el dinero de los impuestos en referéndums, sino que luego empobreció a la población a causa de las sucesivas subidas del recibo de la luz, porque el PSOE se viene mostrando incapaz de corregir sus errores, sino que persiste en la línea equivocada haciéndolos más grandes. Así pues, la decida apuesta por las renovables .¿otra vez siguiendo el modelo alemán?-, con el consiguiente riego de subvenciones, o sea, saqueando de nuevo a los contribuyentes, vino a encarecer todavía más el recibo de la luz.
Los que prometen que no se quedará nadie atrás y presumen de velar por los trabajadores, pero les roban los sindicatos mediante sobornos, no tienen miramientos con ellos..
Cuando la ideología lo impregna todo, todo está perdido.
Luego hay que hablar del PP. Ni Aznar ni Rajoy optaron por cuidar a los pobres construyendo centrales nucleares. Ni siquiera se atrevieron a proponer el debate.
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